domingo, diciembre 30, 2012

Feliz año nuevo

Técnica mixta
18 euros (gastos de envío incluídos)

Para adquirir una de las ilustraciones enviar correo electrónico para detalles.

domingo, diciembre 23, 2012

Little poetry les desea felices fiestas...


Se han reunido en esta postal navideña Laia López Manrique (el ángel que sobrevuela cabezas) y de izquierda a derecha, Gonzalo Escarpa, Luna Miguel, Ana Gorría, Patricia Esteban Erles, Vicente Luis Mora y Berta Vías Mahou.

viernes, noviembre 30, 2012

Antigua, como él.

" Y sí, yo lo comprendo que debo ser antiguo, porque me gustan las historias contadas con esmero y son las únicas que me creo; a mí no me va la prisa ni el "da igual" ni el "tú ya me entiendes", no, yo sólo entiendo lo que me cuentan bien, me acostumbré desde niño con las historias de mamá, yo si una cosa me la explican mal no me entero, qué le voy a hacer. Por eso me entero de lo que dices tú y me lo creo, porque consigues ponérmelo delante de los ojos y que sea igual que estarlo viendo."

Retahílas. Carmen Martín Gaite

domingo, noviembre 25, 2012

lunes, octubre 29, 2012

Sucede que una se cansa de estar sola. Quisiera ver otras personas, aunque fuera gente sin cara. Esther suscribe lo que escribe Alejandra. Y añade: en los raíles de acero / ardientes/ por el paso precipitado de un vagón vacío/ crecen las amapolas/ como pesadilla/ que aventa en la noche/ cuando nadie dice adiós.

jueves, septiembre 27, 2012

Esto es lo que sé hacer y esto es lo que hago.


Querida amiga:

De todos los acontecimientos, el de nacer, es el más hermoso. \ Entre vivir y morir, la certidumbre de la lejanía.\ Saber que lo lejano está aún más lejos.\ Conformarse con cerrar los ojos y respirar. \Esperar.\ Cortar unas cuartillas para ratificar la existencia.\ Ignorar el destino que elegirá el azar para este pequeño animal callado que respira hondo.\  Elevar a grado máximo lo errátil para rectificar con un beso.\ Con un beso.

domingo, septiembre 09, 2012

Mi amor de verano

A partir de mañana día 10 comenzará ha distribuirse el libro de relatos Mi amor de verano, cuyos derechos de autor han  sido donados a ADISLI, asociación para personas con discapacidad intelectual ligera e inteligencia límite. En él, entre otros autores, podremos encontrar un hermoso relato escrito por Esther Peñas y que he tenido el honor de ilustrar con mis colores.

Os adelanto la ilustración para abrir boca.


miércoles, agosto 22, 2012

Trabajando, corrigiendo, suspirando.

Ando últimamente empeñada en concluir algo que no sé si es poema o es biografía o es nada. Algo debe ser porque habla de mí -como no podía ser de otra forma- y habla del amor y de la muerte. Y cuando lo escribo -y cuando lo corrijo- lloro como una niña que ha roto su juguete. Duele, pero también hace cosquillas y sonrío. Hay un pedazo que me gusta especialmente que habla de mi abuelo.

A mi abuelo le falta un trozo de lengua. Los cristales de sus gafas tienen nubes. Las nubes impiden que veamos sus ojos azules. Sus ojos también tienen nubes. Un bastón con cabeza de perro le ayuda a caminar. A mi abuelo le llaman don José cuando quieren sacarle los cuartos.

Me he dado cuenta de que pienso mucho en él.  Aunque no le echo de menos a él, sino a esa época que viví junto a él. Yo era pequeña. Muy pequeña. Mi familia, humilde. Muy humilde. Todo tan precioso visto desde la distancia....

Aquí sigo trabajando, corrigiendo, suspirando. A ver qué sale de todo esto.

viernes, agosto 10, 2012

Yo

Quiero decir
y quiero gritar
muchas cosas
más aún
quiero llorar
a carcajadas quiero
reír
pero apenas sale
una leve sonrisa
una gran sonrisa
puesta del revés
una sonrisa
al fin y al cabo
de payasa
con nariz brillante y verde
y blanca y roja
Quiero ser
No me basta
sólo con ser
más aún
ser.

martes, julio 03, 2012

renacer de rostros
emprende la mañana
como gesto de lluvia y nubes
en el destierro del dormitorio
herido de estrellas
que tú y yo cortamos
como flores los hilos
conmueve
la luna –Inge- clara
hasta originar un lenguaje
                             –oscuro, Inge-
sólo para nosotras.

Descansa el unicornio,
descansa, sobre tu
soñada presencia.

jueves, junio 14, 2012

La poesía
debe ser
un mal común
entre los administrativos.

Tal vez
la ley de compensación
trata de hacerlos
más humanos.

miércoles, mayo 30, 2012

Los brazos de Dios

Los balcones que rodean el convento, cuajaditos de geranios y petunias, evitan el gamberreo de los pájaros colgándose unos grandes pendientes plateados que, en un pasado no muy lejano, tuvieron una ocupación más melodiosa. Pues bien, cuando el sol sonríe y estira sus cabellos alcanzando estos balcones, hace refulgir los aros que se cuelan a través de los ventanucos del convento, y entonces, sor Obdulia, dubitativa en su reclinatorio, acompañada por una fe acróbata a punto de derrumbarse, es envuelta por cientos de halos de luz. Sólo entonces, junta las manos sobre su blando pecho, con tenacidad y reza ante tan abrumadora evidencia.

Texto publicado en Conseguir los sueños, Ed. Hipálage.

viernes, abril 27, 2012

Sin fin.


Después del fin del mundo, desorientados, logramos llegar a otro mundo en donde nos topamos todos los que habitábamos ese otro mundo ya extinguido. También por allí se rumoreaba la llegada de un fin del mundo y no quedó más remedio que organizarse para el fin del mundo del fin del mundo. Al llegar a ese nuevo mundo del fin del mundo del mundo ya extinguido, no se hablaba de otra cosa que no fuera el inminente fin del mundo. Asustados, comenzamos a organizarnos para el fin del mundo.

viernes, abril 20, 2012

Ejercicios de identidad.

Aquella noche
los libros, despertaron
para siempre.




Querida amiga:

Nunca te he confesado el modo en el que hablábamos de Hemingway y la Dietrich. El parecido de él con el señor X es asombroso. Y su pequeña kraut. Aquella pasión nos emocionaba. Del mismo modo conversábamos de Klaus y Lucas. Hablábamos como si fuéramos ellos. Y también, como ellos, practicábamos ejercicios de endurecimiento. Qué bien hicimos. Como si siempre hubiéramos sabido –desde el principio- cuál sería el final. Todo el mundo –incluso tú, querida amiga- debería ponerlos en práctica para, llegado el momento, no sentir dolor. Golpearse regularmente con la intención de no sufrir con los embates venideros. Ser más fuertes para resistir. Desde entonces admiro a Agota como se admira a una maestra. Leo sus frases cortas. Intento memorizarlas. Embriagarme de ella.


Pero,

al final,

siempre

aparezco yo.

lunes, abril 16, 2012

viernes, abril 13, 2012

Animal fabuloso de veintisiete letras. [por Jose Oscar López]


...los enanitos del jardín se baten con las ninfas
por el agua, en su reino imaginario.



El Sr. Tropovski es un tipo raro. Como yo también lo soy, conectamos exquisitamente. Quizás sea yo menos rara que él. Su rareza consiste en ser genial. La mía, en ser simplemente extraña. Él dibuja seres fabulosos, yo ángeles. A veces pienso que somos la misma persona con signo contrario, en tierras distintas, en diferentes vidas, pues él, como yo, sabe que viven los unicornios.

Ayer mi buzón de correos tenía otra luz. Dentro palpitaba Animal fabuloso de veintisiete letras. Los poemarios de este pájaro cantor me entusiasman por las dedicatorias. En ellas, seres increíbles, adornan las palabras. Abro el gran sobre como si fuera un regalo de cumpleaños. Y me siento doblemente sorprendida. La felicidad no da la felicidad, como reza un poema de la plaquette, pero qué sensación de tranquilidad.


Animal fabuloso de veintisiete letras, es una plaquette que reparte el Colectivo Iletrados en Murcia.

colectivoiletrados.blogspot.com

lunes, abril 02, 2012

He aquí el mundo, por encargo.

Llevo un tiempo ilusionada con una pequeña plaquette. Va cargada de emociones. Tal vez sea un descaro. No lo sé. No me atrevo a juzgarlo tan impaciente me siento. Pero es muy cierto que He aquí el mundo quiere emprender un viaje. Pueden estar seguros de que en cada ejemplar que elaboro hay mucho tiempo y esfuerzo pero también muchas ganas de compartirlo. Cada portada es distinta y en ellas caben los collages, las acuarelas, los gouache o los pasteles. Así pues, va de hogar en hogar, a brinquitos de gorrión. He pensado, no sé si acertando, en tratar de darle una modesta difusión. Es complicado no tener a nadie que te lleve de la mano. Que te diga por dónde debes ir. Qué debes esquivar. En dónde debes detenerte. Voy a tratar de hacerlo sola. De mí a tí. He aquí el mundo va cogido de mí titubeante. Por si le quieres dar la mano:


miércoles, marzo 28, 2012

viernes, marzo 23, 2012

Querida mía...

Comienzo a sentir deseos incontenibles de escribir una carta. De querer decir Querida señora, Querido señor, querida mía, querido mío, Suya, Tuya. Dejar de añorar a John Coltrane y la dulce marea que acarrea su música. El mismo deseo que el de escribir pequeños relatos como quien juega una transoceánica partida de ajedrez. Ahora yo, ahora tú. Mientras tanto, digamos que dibujo muñecas. Entre relato y relato llantos, risas, odios, gorriones.

Me preocupa que la no realización de este poderoso deseo termine acumulando ciénagas en mi pecho. Sintiendo estos temores, recuerdo a Chloé y las flores que arraigaron en sus pulmones. Siempre me soñé ella. Indefiniblemente ella ¿Tendría alguna semilla a punto de germinar? ¿la tendré yo? ¿serán suficientes mis lágrimas? ¿necesarias?

No debe suceder. Te escribiré, querida extranjera. Aún no sé si me comprendes. No empleamos el mismo lenguaje. Pero yo te escribo. Lleno los vacíos que quedan huérfanos entre mis frases. Y al hacerlo vuelve aquella música que me embriaga, y vuelve el cuchillo a hundirse entre el corazón y el olvido. Y me sueño Chloé, y de nuevo, retorno al temor de los jardines y sus gorriones.

viernes, marzo 09, 2012

Digámoslo así.

Digámoslo así.
Antigua
Como los pañuelitos de organdí.
Me gustan las páginas que amarillean.
Sentir que engorda el lado izquierdo y no el derecho,
que, directamente proporcional, va muriendo.
Cómo caen las páginas
de un lado al otro.
De una en una.
Con esa conveniente morosidad propia de la lectura.
El dulce polvo de una biblioteca.
Y el silencio.
Llamémoslo por su nombre.
Arcaica.
Como los ribetes de bolillo.
Qué sentido tendría Desierto
sino es en libro.
Por no hablar del pavor.
El de todas las cabezas fijas
en los reflejos de su pantalla.
Todos en su soledad.
Encerrados en sus cuatro ángulos de plástico.
Tanto aislamiento que asusta.
Entendamos entonces lo que soy.
Antediluviana.
Porque disfruto subrayando palabras.
Frases completas.
Garabateando márgenes.
Así que... por qué molestarme.
Asumamos quién soy.

martes, febrero 28, 2012

Semblanza.

Aún conservo una nariz de payaso de color verde.
También un bote de arena de playa nocturna.
Guardo un libro de relatos.
Sus pastas son moradas.
Duerme entre la poesía.
Aún me estremezco cuando huelo las lilas de aquella inmóvil verja.
Cuando las hay.
Siempre sonrío.
A veces lloro.
Leo Todas las almas.
Leo Un cuarto propio.
Leo Noventa y nueve poemas.
Leo y leo.

Adonde te lleve el cabo de un hilo.

U no llega a Vladimir Maiakovski no por casualidad. No es fácil toparse con ese autor siguiendo la senda aterciopelada de la impasibilidad. ...