jueves, mayo 28, 2009

III.

Quién fuera arena
y que me caminaras
perdido en la piel.

Quién fuera ese mar
y que me acariciara
suave tu cuerpo.
Nota de la autora: Apenas sabía de la existencia de las tildes... lágrimas oblicuas que me llueven.

Amar siempre

A veces me sucede que tengo tantas cosas que decir, que no sé bien por dónde empezar y, finalmente, no digo nada. Digo decir cuando quiero d...