Esther Cabrales (Madrid, 1973). Poeta. Ha cursado estudios de Derecho y de Filología Hispánica que jamás concluyó, porque siempre estuvo profundamente dedicada al sector financiero. Ha publicado Erosión (Renacimiento, 2017), Cuerpos (Renacimiento, 2019), Animal (Torremozas, 2021), Lengua muerta (Páramo, 2021), Mondo (Bajamar, 2024). Poemas suyos han sido incluidos en antologías nacionales, como son Rojo Dolor (Renacimiento, 2021), Distopía en femenino (Elenvés, 2023).
sábado, febrero 11, 2017
Elizabeth Bishop
El arte de perder no es difícil de dominar;
demasiadas cosas parecen tan colmadas en el intento
de perderse que su pérdida no supone un desastre.
Pierdo algo cada día. Acepto el aturdimiento
de perder las llaves, la hora malgastada.
El arte de perder no es difícil de dominar.
Entonces practico perder aún más, más rápido:
lugares, y nombres, y donde dijiste que viajarías.
Nada de esto supondrá un desastre.
Perdí el reloj de mi madre ¡Y fíjate! mi última pérdida, o casi,
mis tres adoradas casas.
El arte de perder no es difícil de dominar.
Perdí dos ciudades amadas. Y un vasto reino que me pertenecía,
dos ríos, un continente.
Los añoro pero no supuso un desastre.
Incluso perderte a ti (tu voz bromista, un gesto que adoro) no habré mentido.
Es evidente que el arte de perder no es difícil de dominar
aunque escrito pueda parecer todo un desastre.
Versión mía. El poema original está aquí
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
Adonde te lleve el cabo de un hilo.
U no llega a Vladimir Maiakovski no por casualidad. No es fácil toparse con ese autor siguiendo la senda aterciopelada de la impasibilidad. ...

-
El hombre aproximativo , de Tristán Tzara . ... un tronco de árbol puesto sobre el borde fuma todavía espesas nubes y un bosque querría pega...
-
T odo empezó mañana , cuando la niña rica se pregunta, mientras contempla sus dedos de porcelana qué hubiera sido de ella de haber nacido al...