jueves, septiembre 12, 2024

Palabras de Jorge Pérez Cebrián para MONDO

Jorge Pérez Cebrián
No conocemos la realidad. Ante ella se nos pone entre paréntesis la voz, o nos cubrimos de una pasión cualquiera tras la que justificar la soberbia de nombrarla. Pero no es ahí, en esa realidad de ley y ciencia, donde sucedemos. Más allá de lo real, vivimos. Vivimos como un incendio incontrolable, habitando y habitados por la titubeante verdad de un mundo vivo. Para este animal que somos, la verdad no es ley sino algo que acaso sólo cabe en un corazón ambiguo, habla la lengua de la contradicción, danza en el auge y la caída de los sueños y no la desacredita un imposible. Descubrir la vida es descreer de un mundo que se deje describir del todo, porque su sola contemplación sincera nos diluye el idioma: porque intentar decirlo es medir su tumba. Y es aquí donde una sensación perdida vive tan cierta, cualquier dolor tan necesario, como un tango que alguna vez pasó en alguna parte, como la minuciosa vacuidad que compone el tiempo o la indeleble felicidad que anuncia la nostalgia o la promesa. No busquemos más. En estas hojas arde   su calma el mundo. Sucede la mirada, la voz de quien se sabe vida en cada cosa. Porque quizá tan sólo en el instante mínimo, en el aire que respira entre palabras o en la nimia voluntad de ser a tientas, quepa al fin la vasta e inabarcable verdad que estamos siendo. Porque es aquí donde la vida ocurre: en la humilde grandeza de sabernos mundo.



No

N o nos conocemos. Yo, apenas me conozco. He superado el medio siglo y me soy una completa desconocida. Y eso que paso mucho tiempo conmigo....