Cómo dibujar a Maiakovski sin reparar en Ajmátova, en sus ojos verdes, en su tierra blanda. Sé que os sorprende que no me detenga en Lily Brik. Os diré por qué. A Lily la tenía, a ella y a Osip. Tenía el pack completo, pero a la acmeísta la deseaba, aunque lo expresara tan violentamente. Sabía que, de conseguirla, caería muerto de amor. Cuando Maiakovski se transparentaba tenía una Ajmátova desnuda por corazón.
Cuaderno de apuntes de ESTHER CABRALES
Las ilustraciones que aparecen en este blog son fruto de la autora.
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